El Teatro de La Abadía trae a Madrid El dilema del corcho, del 24 de octubre al 10 de noviembre
La Abadía y Tartean Teatro presentan por primera vez en Madrid El dilema del corcho. Tras su estreno en la versión en euskera en el Teatro Arriaga en 2023 y su versión en castellano en el mismo teatro el próximo 18 de octubre, ahora llega este thriller, con tintes de comedia, al Teatro de La Abadía en castellano. El dilema del corcho está escrita y coprotagonizada por Patxo Telleria a quien acompaña en el escenario Ramón Barea. La obra podrá verse en la Sala José Luis Alonso del 24 de octubre al 10 de noviembre.
La obra narra cómo el Profesor (Ramón Barea), un prestigioso y agitador catedrático de Ética y Filosofía Política jubilado, se plantea renunciar a un tratamiento que podría acabar con su cáncer terminal. Su vida depende de un equipamiento de radioterapia avanzado que un conocido magnate le ha ofrecido para lavar su imagen. Ahora el Profesor debe decidir si ser fiel a sus principios e inmolarse o bajarse los pantalones y “besarle el culo” al filántropo. Cuando ha tomado una decisión y la va a hacer pública, recibe la visita de un misterioso personaje, un antiguo Alumno (Patxo Telleria) con el que tiene cuentas pendientes.
¿Por qué una comedia política?
Tartean Teatro, fiel a su compromiso con el teatro contemporáneo y empleando las nuevas formas y utilidades del teatro posdramático, se apoya en dos registros reconocibles como son la comedia y la tragedia. Este es el caso de El dilema del corcho que, pese a abordar conflictos políticos y dilemas morales con mucha carga de profundidad, lo que convierte a esta obra en una comedia y no en un drama político es su estructura con “un duelo psicológico, un tête a tête, de los dos personajes protagonistas”, añade Patxo Telleria.
La forma en que está planteada la trama hace que esta pieza sea una comedia de enredo, en la que constantemente van saliendo conejos de la chistera que toman a los personajes y al público por sorpresa y que cambian radicalmente la dirección de cada situación. Nada es lo que parece en un principio. “En el fondo, sin embargo, El dilema del corcho tiene mucho de tragedia y de teatral. Cuando parece que todo está planteado en escena, llega de repente un giro inesperado que lleva a un dilema moral. Es en definitiva un juego muy divertido para el actor y el público”, afirma Ramón Barea.
Por último, al mismo tiempo es una obra política, en el sentido más humano del concepto, porque coloca a los personajes al borde del precipicio. Les obliga a asumir, con todas sus consecuencias, ciertos principios que les puede costar la vida. “Quiénes somos, de dónde venimos y adónde vamos, qué nos pasa por dentro cuando la víctima es uno mismo” son preguntas que se formulan en el espectáculo, en palabras de Mireia Gabilondo, directora de la propuesta escrita por Patxo Telleria.