Información
- Dirección
- María Terremoto
- Reparto
Cantaora: María Terremoto
Guitarra flamenca: Nono Jero
Compás: Manuel Cantarote y Juan Diego Valencia- Producción
- Lugar
- Sala Juan de la Cruz
- Ciclo
- Festival Suma Flamenca
- Horario
Miércoles: 19:30 h
Sobre la obra
La niña jerezana que sorprendió a todos los cabales con tan solo dieciséis años, haciéndose con galardones tan importantes como el Giraldillo Revelación de la Bienal de Flamenco de Sevilla y La Venencia Flamenca, se ha convertido en una auténtica figura del cante jondo. María Terremoto ha querido una vez más dejar a un lado los artificios musicales y los guiones que asfixien su cante, presentándose de la manera más tradicional posible, con el único acompañamiento de una guitarra y dos palmas, como se ha hecho siempre, intentando crear con el espectador una línea directa sin interferencias de ningún tipo. Una desgarrada y potente voz que llegará hasta lo más profundo del que se siente delante.
Sobre la artista
Jerez ha regalado un imperio de voces al flamenco. Uno de los más grandes, considerado maestro de la seguiriya, fue Terremoto de Jerez. María Terremoto, hija de Fernando Terremoto y nieta del Terremoto de Jerez se estrenó con una zambomba en un patio de vecinos, cuando cumplía un año. El padre revolucionó la zambomba y la hija, con el derroche de voz, hace justicia al nombre artístico familiar. “Si viviera, mi padre hubiese querido que mi lanzamiento como cantaora no hubiese sido tan pronto. Él habría preferido que yo hubiese estudiado el flamenco en profundidad antes de subirme al escenario”, cuenta la cantaora.
María Terremoto canta desde que era migaja de pan. Recuerda emocionada cómo fue el reencuentro con su padre, cuando regresó a los tablaos tras recuperarse de una enfermedad. Le brindó, en la peña de su familia (la Asociación Cultural Fernando Terremoto), una bulería con 8 años. “Mi padre era guitarra, su maestro fue Manuel Morao. Mi padre no cantaba ni en las bodas de sus hermanas, no era capaz ni de tocar las palmas. Hasta que un día se arrancó a cantar y le animaron a presentarse a un certamen en la Peña Don Antonio Chacón. Allí debutó como cantaor, a los 22 años”, cuenta María Terremoto.
Fernando Terremoto dejó para la posteridad tres discos, tres mayúsculas maravillas. En Madrid formaba parte del elenco de Las Brujas, Casa Chicote y Los Canasteros. Terremoto de Jerez -abuelo- también empezó a cantar más tarde que la nieta. Él era bailaor de profesión. La seguiriya es un palo para pasar fatiga, con letras profundamente duras, interpretadas entre el dolor y el llanto. “Es un palo que no puede cantar cualquiera. De chico, mi abuelo pasó mucha pena y desde lo más profundo sacaba la rabia para llegarnos al alma”. La Terremoto cree que su abuelo era un flamenco puro, de cante hondo. Su padre era un artista más completo, con mejor formación, conocedor de otros estilos musicales y compositor de coplas.
María Terremoto estuvo un tiempo viviendo en Sevilla. Allí conoció a la gran bailaora Manuela Carrasco, que para ella es su tercera abuela. La nieta de Carrasco y ella iban juntas al cole. “Manuela me enseñó muchísimo. A ella y a mi abuela materna – María Márquez, también cantaora de Jerez- les debo parte de lo que sé”. De ahí que la artista, además de cantar, tenga mano con el baile. La niña que hace de los fandangos un regalo de los dioses, dice que su vida es el cante, que donde no llegan las palabras llega el quejío, y que su manera de expresar lo que siente es desde este arte.
Su gran oportunidad le llegaría en 2016, durante el Festival de Jerez, en el que ofreció un recital que generó una alabanza de la crítica sin precedentes para una artista de su edad. Esta actuación supuso el pistoletazo de salida a una temporada en la que actuó en multitud de peñas flamencas y grandes festivales. En 2016 tiene lugar uno de los puntos de inflexión en su carrera como cantaora. Participa como artista invitada en la gala Música para la investigación, protagonizada por el cantaor Miguel Poveda en el Teatro Liceo de Barcelona y emitida por Televisión Española. Su actuación deja impresionada a toda la afición flamenca.
Su consagración como cantaora llegó en la Bienal de Flamenco de Sevilla de 2016, en la que logró el Giraldillo Revelación, siendo la artista más joven de la historia en conseguirlo, premio que fue respaldado al año siguiente con la prestigiosa Venencia Flamenca a la artista joven con más proyección. Tras recibir estos galardones, María Terremoto se convierte en uno de los grandes exponentes del panorama flamenco, lo que la lleva a sacar en septiembre de 2018 su primer trabajo discográfico, La huella de mi sentío, con el que recorre España, Europa y Estados Unidos.
Tras una exitosa gira, en la que pisa los escenarios más importantes del panorama jondo, recibe el galardón Cruzcampo a la mejor actuación en el Festival La Isla Ciudad Flamenca, el Premio Joven Ciudad de Jerez 2019 y el Premio a Nuevos Creadores 2019 del Secretariado Gitano.
En la actualidad recorre ya como primera figura los festivales más importantes a nivel nacional e internacional, destacando sus actuaciones en lugares como Mont de Marsan, Nimes, Nueva York y Miami, y la dirección en 2019 de La Fiesta de La Bulería Joven de Jerez, compaginándolo con la creación del que será su segundo disco de estudio, con el que su equipo espera poder llegar a un público más amplio desde el prisma de la pureza jonda.
Ficha artística
Cantaora: María Terremoto
Guitarra flamenca: Nono Jero
Compás: Manuel Cantarote y Juan Diego Valencia
Sonido: Álvaro Mata
Producción: Hugo Pérez – Enflamenco Producciones,
Premios
Giraldillo “Revelación” en la Bienal de Sevilla 2016Cantaora de Jerez