Los enfermos

Sobre la obra

Premi Born de Teatre 1996 a Antonio Álamo

Estamos en el final de la Segunda Guerra Mundial;
Hitler prepara su suicidio y mientras, mantiene un cínico diálogo con la Historia. Días
después, cerca de Berlín, Stalin se reúne informalmente con Churchill, que está
preocupado  por las andanzas del cadáver
del Führer: la multitud de cadáveres de los dobles de Hitler que han aparecido
pone en duda la tranquildad del futuro de Europa. Años después, Stalin organiza
en su dacha una de sus habituales cenas con sus ministros. La degradación a que
éstos se someten, provocados por el particular juego de Stalin, queda patente
hasta el escarnio. Estos tres colosos -Hitler, Churchill y Stalin- hipertensos
y arterioscleróticos, reflejan un hilarante diagnóstico de nuestro siglo.

Antonio Álamo escribe y publica desde 1986; la inusual
cantidad de premios recibidos y el éxito de sus obras, que se han visto casi en
su totalidad estrenadas, le sitúan como un consolidado dramaturgo. Los
enfermos ha recibido el Premio Born.

Stalin: Esos cadáveres tal vez
sean los de Hitler y Eva Braun o tal vez no lo sean. Ante esto, ¿qué puedo
hacer?, ¿qué opción me queda? Yo haré que el mundo crea que esos cadáveres son,
en efecto, los cadáveres de Hitler y Eva Braun. No sólo eso. Yo haré que el
mundo, al mismo tiempo que lo cree, lo dude. La duda es importante, señor
Churchill. La duda causa inseguridad, y la gente necesita esa inseguridad para
necesitarnos a nosotros. Ningún Estado puede mantenerse si no flota en el aire
la amenaza del caos.